Es importante que consumas alimentos como frutas y verduras, pues son fundamentales para aportarle las vitaminas que tu pequeño necesita. Estas puedes cocinarlas al vapor o comerlas crudas, pero no las hiervas ya que es posible que pierdan las vitaminas que contienen.
Además, los alimentos ricos en hierro son clave, pues ayudan a la formación de glóbulos rojos de la sangre. Este puedes encontrarlo en alimentos como las carnes rojas, magras, vísceras y en otros alimentos como pescado, aves, espinacas, lentejas y frijoles.
A medida que vas avanzando en las etapas del embarazo, empezarás a notar cambios mucho más notorios. Tu pancita empezará a crecer mucho más y alrededor de la semana 21, hay alimentos que deberás consumir para ayudar a que tu bebé se siga formando saludablemente. En este periodo, la vitamina A es fundamental para la salud visual, sin embargo, no hay que consumirla en exceso pues tu bebé se podría ver afectado. Esta vitamina se encuentra en los alimentos en forma de retinol o betacarotenos. El retinol, si se consume como suplemento o de manera externa, se recomienda consultar con un profesional de la salud, por otro lado, los betacarotenos los puedes encontrar en vegetales y frutas de color naranja o verde oscuro.
Otros nutrientes que juegan un rol fundamental en el embarazo son el calcio y la vitamina D, pues el calcio ayuda al desarrollo de huesos y dientes sanos en nuestro bebé, así como al de su corazón, sistema nervioso y músculos. Por otro lado, la vitamina D ayuda a que tu cuerpo absorba de mejor manera el calcio y esta sea transmitida más fácil.
Hasta aquí ya habrás llegado a la mitad del embarazo y te faltarán solo unas pocas semanas para ver nacer a tu bebé, así que ánimo y a seguir cuidando tu alimentación, pues será la clave para su crecimiento y desarrollo.